7.11.05
Cuatro, o el complejo provinciano
(OPINIÓN) Antes de nada un Resumen para quien no quiera leer todo el texto.
Arranque de Cuatro:
Compromiso, gorra de beísbol, perilla, punk en inglés, comida china en la calle, pobretones risibles, "hostia", "del te al cóctel", "a explotado", ministra, realities, agencia efe, "no creemos en nada".
Cuatro, la televisión en abierto del grupo Prisa, ha comenzado a emitir esta tarde. A las 20.44, el insigne Iñaki Gabilondo, con corbata roja, pasaba del "ustedes" al "vosotros" en una intervención de esas que buscan crear un vínculo especial, una relación de intimidad entre el medio y el público.
Poco a poco el plano se va abriendo y van entrando los "rostros" de la nueva cadena. En seguida aparece una veintena de presentadores sentados en una grada: alguien con perilla, con gorra de beísbol, más arriba un presentador mulato... Tras dos intervenciones de otros presentadores, queda firmado el contrato entre cuatro y su público. Puesta en pie y aplausos (en el decorado, claro).
La autopromoción
A continuación, una autopromoción de la cadena hace un repaso rápido de los programas estrella del nuevo medio. Dos actores extranjeros en una parada de autobús sirven de hilo conductor.
Un éslogan: "Cuatro es tu realidad"... pero los protagonistas de la autopromoción compran comida china, con palillos y todo, a una vendedora de la calle. (Eso puede pasar en Nueva York), no en España.
En otro de los eslóganes se puede leer la palabra "realities". El 90% del público no sabrá qué son. Pero los creativos lo usan a diario, y ellos no tienen por qué conectar con el resto de la masa.
Las únicas canciones con letra que aparecen en la autopromoción tienen las letras en inglés.
Aparece Carlos Latre, e imita a Santiago Segura...
Aparece una pareja de macarras locos por el tunning. Hablan como gente con poca educación (al parecer eso es lo que les hace risibles).
Aparecen cuatro chicas (todas bellísimas) que comparten piso (ése va a ser el "reality")
Aparece un chico joven que mira una cámara de vídeo y dice "hostia" (es prácticamente la primera palabra que verbaliza un personaje en toda la autopromoción).
Suena otra canción con la letra en inglés.
Luego hay una avalancha de extractos de series de Estados Unidos rescatadas del olvido: el programa para gente joven va a ser de tipo "contenedor". Dos presentadores guapos que sirven de nexo entre producciones anglosajonas.
Una especie de "Club Megatrix" para treintañeros.
Otro presentador, desconocido, dice "nosotros no creemos nada". Relativismo posmoderno de diseño.
El informativo.
Cuando arranca el informativo, Iñaki Gabilondo exporta levemente algo típico de la radio: la valoración previa de las noticias del día. Lo hace de pie. Ése va a ser su gran momento cada día. Lo que marque la pauta de muchos gabinetes políticos.
Un accidente laboral en Granada y los disturbios de París son las primeras noticias.
La de Granada entra con imágenes de la agencia EFE, no con material propio. La de Francia entra con imágenes, también de agencia, que tienen casi veinte horas de antigüedad.
Gabilondo tiene tablas y ya ha conectado con el público.
Ministra reportera.
Pero la sorpresa viene cuando la primera conexión en directo con el lugar de una noticia (Granada) se hace de sopetón con la ministra de Fomento, Magdalena Álvarez.
Generalmente, para un medio primerizo es difícil contar con un ministro en directo.
No se ve la mano de otro periodista. Parece que es la mano de la Ministra la que sujeta el micrófono. Es ella la que informa.
Luego usan el software cartográfico de CNN+ para situar el lugar del accidente.
Tras un corte abrupto con la minsitra, el pelo de Gabilondo se mueve levemente por un ventilador sin duda instalado para evitar el sudor.
En la noticia de París, aparecen jóvenes implicados hablando en francés. Hay subtítulos. En uno se puede leer. "Entonces todo a explotado" (Sic).
"a explotado". Sin hache.
Conclusión
Cuatro ha arrancado mal que bien. Es una buena noticia, y habrá cosas valiosas en esta nueva cadena.
Ya es una televisión mejor que muchas de sus rivales (no mejor que La2, desde luego, pero tampoco lo pretende).
Pero mucho tememos que reproducirá ese estilo frívolo, pseudopijo, estiloso, presuntamente "moderno" y siempre orientando al consumo, que tanto irrita al público inteligente, crítico, y que se adivina en otros productos periodísticos.
Un estilo que parece querer ocultar un complejo de provincianismo...
Quizá sea Gabilondo el único que pueda contrarrestar eso.
Así lo esperamos.
Suerte a todos los que han llegado a Cuatro. Nos hubiera gustado estar más ilusionados.
1 Comments:
Joder, compañero, te leo y lo mío parece un plagio. Tal vez es solo que hemos visto lo mismo:
http://fogonazos.blogspot.com/2005/11/ya-estn-aqu.html
By Antonio Martínez Ron, at 7 de noviembre de 2005, 23:45