22.9.06
Carta abierta a quien corresponda
(¿EGO?) Quizá esto no es lo que esperabas. Seguramente. Tampoco se trata de que te pongas en plan treintañero pesado, como ese giro argumental de Clerks II, película que sólo hemos ido a ver los que alucinamos con Clerks.
Quizá en tu generación ya haya demasiadas papadas. Increíble el baby boom. Increíble lo que nos está costando todo.
Y ese poco que estás consiguiendo por ti mismo, joder cuánto se esfuerzan en quitártelo los que ya lo tienen todo.
Como si no lo merecieras.
Y ya verás cuando llegue el futuro que no existe e intentes cobrar una pensión y los jóvenes que te rodean sean cuatro veces más egoístas que tú (que ya eres cuatro veces más egoísta que tus mayores).
‘Buenos días nos dé Dios’ es un programa de radio que se puede oír en Radio Nacional a las 5.55 cada día.
A esa hora lo oigo yo. Hoy, un cura de Córdoba ha dado tres claves para llevar una vida auténtica. He olvidado las dos últimas, pero la primera vale un Perú: “No tengas miedo”.
Y no era el típico rollo de “no tengas miedo, Dios te salva”. No, no. Era “no tengas miedo”, a secas. Este cura cordobés es un buen tipo. Le he escuchado más días en duermevela. Nunca dice tonterías. A veces toman la palabra otros curas que dan grima.
Es que las instituciones, los partidos políticos, los sindicatos, no son de una forma o de otra. Todo depende de cada persona.
A lo que íbamos:
¿Tienes miedo? ¡¡¡Eh, sí, es a ti, treintañero!!!!: ¿Tienes miedo?
“No hago nada sin alegría”. Otra frase elocuente. Y otra: “Quien tiene un buen ‘porqué’ aguanta cualquier ‘cómo”. Y otra: “Cuanto más amo a la humanidad, en general, más odio a cada ser humano, en particular”.
Pero, ojo, éstas no son del cura, aunque seguro que él sabe de quién son.
Vale. Seguimos.
Deberías comer menos, correr más ( o simplemente correr). Leer más, ver menos la tele. Hablar más con gente, tener vida social. Ya deberías haber encontrado el amor verdadero. Al menos deberías estar intentando encontrar el amor verdadero.
Tu negativa a tratar siquiera de enamorarte resulta irritante.
Deberías defender tu derecho a no hacer nada, ocasionalmente. Aunque “yo nunca estoy sin hacer nada”.
Pero todavía no me has dicho si tienes miedo.
La publicidad y las series ñoñas americanas han acabado por hacerte mella. Pero qué dices, ¿que todavía conservas la osadía (alegría, temeridad) de los veinte?.
En realidad nunca tuviste veinte años. Has nacido viejo.
Mira a tu alrededor. Esto ya parece bastante definitivo ¿no?
Dicen que la vida da giros cuando uno menos se lo espera.
Te pregunto ¿tienes miedo?, ¿es eso lo que te pasa?
Tus mayores nunca tuvieron miedo (tampoco sabían tantas cosas como tú. No empezaron a pensar globalmente -no pudieron hacerlo- hasta los cuarenta).
Si tienes miedo, a lo mejor es porque te lo ha insuflado alguien para que te entretengas en luchar por tonterías y dejes de cuestionar el todo, en conjunto.
El otro día alguien decía: "Nunca he sido tan feliz como cuando vendía pulseras de cuero en la serranía de Ronda, con 17 años".
Coño, pues hazlo. Vuelve a hacerlo. Da el paso. Pero hazlo ya, joder.
A lo mejor lo que pasa es que no mereces más de lo que tienes.
Y lo que tienes es miedo.
1 Comments:
Creo que si.....tengo miedo.
Muy buen post.