La Fragua

Algo huele a podrido...

Se quejaba hace unos días Félix de Azúa de que los políticos cincuentones nunca asumen responsabilidades. En un país donde todo el mundo se escaquea en cuanto puede, los políticos son escaqueadores profesionales.

Maragall larga lo del 3% sin aportar pruebas, la derecha nacionalista le chantajea con parar la reforma del Estatut si va por ese camino (los vecinos del Carmelo alucinan con el pitote, aunque ya han firmado un acuerdo que les satisface).

Luego Maragall no sabe retractarse (¿o es que no puede, porque cree lo que dijo pero no quiere parar la reforma del Estatut?), y ERC (los fatuos) y el PP a chupar la sangre. Mociones de censura, jueces... Éste está siendo un espectáculo político tan obsceno... Desvela tantas insuficiencias personales... Es desmoralizador. El único que parece dispuesto a hacer algo serio (y que lo ha hecho) es Joaquim Nadal (seguro que dimite en breve, espantado).

Y el caso es que todo el mundo sospecha que en España lo de las comisiones en las obras públicas está a la orden del día... que el pelotazo inmobiliario es lo que mueve la economía...

¿Por qué sólo asumen responsabilidades, afrontan los hechos y pagan sus deudas los débiles?