La Fragua

Cruces comestibles

"Hay que venerar la cruz, no comérsela", dijo un portavoz de la diócesis católica de Bridgeport, Connecticut (EE UU), en referencia al hecho de que el tercer productor de dulces de Estados Unidos, la cadena Russell Stover, haya creado para esta Semana Santa cruces de chocolate blanco.

Este dulce está especialmente dirigido al mercado hispano, aunque la Semana Santa es, después de Halloween, la temporada en la que más dulces se venden en Estados Unidos. (Leer más, en inglés)

Es difícil entender el enfado de la iglesia católica por el hecho de que se coman cruces de chocolate, dado que un rito fundamental de los cristianos es el de comerse el cuerpo de Dios. La teofagia es algo sumamente respetuoso. Comer es un acto sagrado.

Y comer es lo contrario de pensar, según decía Aristóteles. Y eso precisamente debe ser la fe: lo contrario de pensar. La fe debe ser irracional, ciega, sin explicación posible, como un enamoramiento, sin que medien palabras o convencimientos.