17.9.13
¿Sería esto posible en España?
La ‘Carta de la laicidad’ entró en vigor en Francia el pasado 9 de septiembre (de 2013). Debe ser exhibida en
un lugar visible de todos los centros educativos públicos del país. Según
indica el Ministerio de Educación francés, la laicidad debe comprenderse como “un
valor positivo de emancipación”. Para el Estado francés, la laicidad es un
principio “indisociable” de los valores de Libertad, Igualdad y Fraternidad. La
carta ha sido recibida favorablemente tanto por sectores de la izquierda como
de la derecha.
No he encontrado traducciones buenas
al castellano -y casi ninguna del documento íntegro- así que publico aquí la mía (creo que
bastante fiel al sentido original) con el fin de contribuir a la reflexión
sobre los lejos que está España del ideal democrático de un Estado laico y
aconfesional y de cómo las inercias clericales de las que no hemos conseguido
desembarazarnos después de más de 30 años de democracia siguen lastrando e
hipotecando el futuro del país. Y lo hacen tanto como los recortes en derechos
sociales que está ejecutando el actual Gobierno.
Carta de la laicidad en la
Escuela.
1. Francia es una República
indivisible, laica, democrática y social que segura la igualdad ante la ley, en
el conjunto de su territorio, de todos sus ciudadanos, y respeta todas las
creencias.
2. La República laica organiza la
separación de las religiones y del Estado. El Estado es neutro respecto a las
convicciones religiosas o espirituales. No hay religión de Estado.
3. La laicidad garantiza para
todo el mundo la libertad de conciencia. Cada cual es libre de creer o de no
creer. [La laicidad] permite la libre expresión de las convicciones dentro del
respeto a las de los demás y dentro de los límites del orden público.
4. La laicidad permite el
ejercicio de la ciudadanía conciliando la libertad de cada uno con la igualdad
y la fraternidad de todos y preocupándose por el interés general.
5. La República asegura el
respeto a cada uno de estos principios dentro de los centros educativos.
6. La laicidad de la escuela
ofrece a los alumnos las condiciones para forjar su personalidad, ejercer su
libre arbitrio y aprender la ciudadanía. [La laicidad] les protege de todo
proselitismo y toda presión que les impediría tomar sus propias decisiones.
7. La laicidad asegura a los
alumnos el acceso a una cultura común y compartida.
8. La laicidad permite el
ejercicio de la libertad de expresión de los alumnos dentro de los límites del
buen funcionamiento de la escuela así como del respeto de los valores
republicanos y del pluralismo de las convicciones.
9. La laicidad implica el rechazo
de toda violencia y toda discriminación, garantiza la igualdad entre chicos y
chicas y descansa sobre una cultura del respeto y la comprensión del otro.
10. Trasmitir a los alumnos el
sentido y el valor de la laicidad, así como de otros principios fundamentales
de la República, es competencia de todo el personal. Éste vela por su aplicación
en el ámbito escolar. Es competencia suya poner en conocimiento de los padres
de los alumnos la presente carta.
11. El personal tiene un deber de
neutralidad estricta: no debe manifestar sus convicciones políticas o
religiosas en el ejercicio de sus funciones.
12. La enseñanza es laica. Con el
fin de garantizar a los alumnos el acercamiento más objetivo posible a la
diversidad de visiones del mundo, y una mayor extensión y precisión de los
saberes, ninguna materia está excluida a priori del cuestionamiento científico
y pedagógico. Ningún alumno puede invocar una convicción religiosa o política
para negarle a un docente el derecho a tratar una materia del programa.
13. Nadie puede hacer prevaler su
pertenencia religiosa para negarse a obedecer las reglas aplicables en la
escuela de la República.
14. En los centros educativos
públicos, las reglas de vida de los diferentes espacios, detalladas en un
reglamento interno, respetan la laicidad. Está prohibido portar símbolos o
atuendos mediante los cuales los alumnos manifiesten ostensiblemente la
pertenencia a una religión.
15. Los alumnos contribuyen, mediante
sus reflexiones y sus actividades, a que dentro de sus centros la laicidad sea
vivida.
(El texto original de la Charte
de la laïcité à l'École puede leerse aquí)
Etiquetas: educación, iglesia, laicidad, laicismo, política, religión