12.6.06
Hay que pararse a pensar
(OPINIÓN) El sábado el Manifestómetro midió la asistencia a la concentración de la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT) en contra del diálogo con ETA y por "la verdad" en el 11-M.
De nuevo dos cosas llamaron la atención. Una: la Comunidad de Madrid (el PP) insiste en tratar como menores de edad a las víctimas y a los manifestantes, diciéndoles que un millón de personas acudió a la convocatoria.
El resto de los cálculos van desde los 185.000 del Manifestómetro, hasta los 198.000 de El País, los 216.000 de El Mundo y los 243.000 de la Delegación del Gobierno.
Estas cuatro fuentes publican y explican sus métodos. La Comunidad de Madrid, la que dice que acudió un millón, no explica nada. Es una cuestión de Fe, ciega.
Si yo fuera militante del PP, me sentiría insultado si alguien tratara de manipularme tan burdamente.
La segunda cosa que debe escandalizar a cualquiera con sentido común, es la monopolización que de estas concentraciones está haciendo la ultraderecha. Las banderas franquistas cada vez son más fáciles de encontrar, y las octavillas que alfombran los recorridos de las marchas son de extrema derecha.
Y repito la frase anterior: Si yo fuera militante del PP, me sentiría insultado si alguien tratara de manipularme tan burdamente. Y si fuera víctima de ETA, más. Como ciudadano, ya me siento insultado.
Es el momento de pararse a pensar. Porque los ánimos están calientes. Y la cúpula del PP está perdiendo el control, para cederlo a la extrema derecha.